Previsión de los precios del uranio en 2024 según Citi
Los precios del uranio se han enfrentado recientemente a tendencias a la baja, manteniéndose dentro de una horquilla de precios limitada y mostrando un ligero descenso debido a la escasa actividad comercial y liquidez del mercado.
Sin embargo, según los analistas de Citi Research en un informe fechado el lunes, es probable que este descenso de los precios del uranio disminuya a medida que crezca la necesidad de energía nuclear y la oferta se esfuerce por satisfacer esta demanda.
Los analistas de Citi mantienen una perspectiva positiva sobre el uranio a corto y medio plazo, y predicen que los precios podrían subir hasta los 98 dólares por libra a finales de año.
A la luz de las condiciones actuales del mercado, Citi ha revisado sus previsiones sobre los precios del uranio. Los analistas prevén ahora que el precio medio del uranio será de 94 dólares por libra en 2024, con la posibilidad de que los precios suban en el tercer y cuarto trimestre del año.
De cara al futuro, Citi espera que el precio medio del uranio sea de 110 dólares por libra en 2025, lo que indica una visión positiva continuada del mercado debido a la creciente necesidad de energía nuclear.
En 2023, la producción de uranio ha aumentado significativamente en más de un 10%, es decir, 14 millones de libras. Este aumento se debe principalmente a la expansión de las minas actuales, en la que Kazajstán desempeña un papel importante.
Las estimaciones de producción para Kazajstán se han incrementado ligeramente, con una producción prevista de 59 millones de libras para este año, ya que se espera que el país supere los problemas relacionados con el suministro de ácido sulfúrico. En Canadá, las minas de Cigar Lake y McArthur River están funcionando mejor y se espera que alcancen su plena capacidad de producción este año.
Se prevé que la nueva mina de McLean Lake añada sólo 0,5 millones de libras a la producción anual.
El ritmo al que reanuden su actividad las minas de uranio y el desarrollo de nuevas minas en todo el mundo serán claves para determinar los precios futuros del uranio. Citi estima que la oferta aumentará en 17 millones de libras en 2024, con incrementos posteriores de 14 millones de libras en 2025, 12 millones de libras en 2026, y una tasa de crecimiento menor en los años siguientes.
Para 2030, se espera que el aumento total del suministro sea de 38 millones de libras. Sin embargo, se prevé que la necesidad mundial total de uranio supere los 40 millones de libras durante el mismo periodo. Aunque es probable que las existencias actuales de uranio proporcionen un equilibrio en el mercado a corto plazo,
Citi indica una disminución a largo plazo de las existencias, con una reducción prevista de 20 millones de libras para 2030, lo que pone de relieve la necesidad de aumentar la producción.
“Las perspectivas de la demanda de uranio mejoran progresivamente, ya que la búsqueda de fuentes de energía limpias y el aumento del consumo de electricidad a lo largo del tiempo hacen que la energía nuclear resulte muy atractiva en todo el mundo”, afirman los analistas.
El atractivo de la energía nuclear es cada vez mayor, especialmente con la creciente demanda de centros de datos.
En Estados Unidos, se prevé que la expansión de la inteligencia artificial y los centros de datos aumente la demanda total de electricidad en un 11% de aquí a 2030. Los recientes resultados récord de la subasta del mercado de capacidad PJM 2025/2026 han superado las expectativas, lo que indica un fuerte potencial de crecimiento de la energía nuclear en Estados Unidos.
Aunque no hay planes para construir nuevos reactores nucleares en EE.UU. en un futuro inmediato, se están tomando diversas medidas para aumentar la demanda de uranio, como mejorar la eficiencia de los reactores, ampliar la vida útil operativa de las centrales nucleares y considerar la reactivación de instalaciones nucleares cerradas.
Se espera que la reactivación de las centrales nucleares tenga el efecto inmediato más considerable sobre la demanda de uranio, ya que la carga inicial de combustible para el reinicio de un reactor requiere una cantidad de uranio tres veces superior a la del proceso de recarga habitual.
En EE.UU., además de la probable reactivación de la central de Palisades en los próximos años, se está debatiendo y preparando la posible reactivación de la Unidad 1 de Three Mile Island, las Unidades 2 y 3 de Indian Point y Duane Arnold.
A escala internacional, es posible que en los próximos cinco años se reactiven también reactores nucleares en Taiwán, India y Canadá, lo que aumentaría aún más la demanda de uranio.
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